Resistencia Comunitaria: De Oaxaca a Gaza, Cinco Lecciones de Lucha
Entre junio y septiembre de 2025, la resistencia comunitaria en México trazó conexiones inesperadas: desde la costa de Oaxaca hasta Gaza, pasando por las montañas mazatecas de Eloxochitlán y las radios comunitarias de la Huasteca. Miguel Hernández, un niño de siete años, murió en un autobús tras diez horas de viaje buscando atención médica. Defensores mazatecos llevan más de una década huyendo de órdenes de arresto por proteger su río del saqueo de grava. Activistas mexicanas navegaron hacia Gaza para romper el bloqueo. Radio Huaya cumplió 60 años sosteniendo comunicación comunitaria con recursos propios.
Por Kino Balu
Miguel Hernández: Cuando Morir en el Camino es Política de Estado
“Vámonos para la casa”, dijo Miguel Hernández. Tenía siete años y llevaba cinco batallando contra la leucemia. Acababa de terminar su última sesión de quimioterapia en el Instituto Nacional de Pediatría de la Ciudad de México. Había visitado el zoológico, visto al oso panda que tanto le gustaba en sus libros. En el autobús de regreso a su comunidad en la costa de Oaxaca, diez horas de camino por delante, la fiebre y los vómitos volvieron. Su padre, desesperado, decidió regresar al hospital. A mitad del trayecto, Miguel pronunció esas palabras. Minutos después murió en los brazos de su padre.
Entre junio y septiembre de 2025, El Giro de la Rueda documentó historias que, a primera vista, parecían ocurrir en geografías y contextos inconexos. La muerte de Miguel en ese autobús. La persecución judicial contra defensoras y defensores mazatecos del río Xangá Ndá Ge. La travesía de activistas civiles navegando hacia Gaza para romper el bloqueo genocida. Sesenta años de Radio Huayacocotla sosteniendo comunicación comunitaria desde las montañas. Cuatro meses, múltiples territorios, una sola verdad: el despojo no tiene fronteras, pero la resistencia tampoco.
Abandono Sanitario en Comunidades Indígenas: Los Datos del INEGI
Para llegar a esa primera consulta médica, cinco años atrás, el padre de Miguel había tenido que vender una vaca. Cada viaje desde la costa oaxaqueña hasta la capital era una odisea de diez horas que la familia repetía una y otra vez. Miguel no murió de leucemia. Murió de distancia. Murió de abandono. Murió porque el Estado mexicano decidió hace décadas que ciertas vidas no merecen un hospital cerca.
Los datos oficiales del INEGI no mienten: la Tasa de Mortalidad Infantil en zonas rurales alcanza 16.7 por cada mil nacimientos, contra 14.6 en zonas urbanas. En Chiapas, Guerrero y Oaxaca —estados con mayor población indígena— las cifras se disparan. UNICEF México documenta que el 91% de niñas, niños y adolescentes indígenas viven en pobreza. Morir en el camino no es una tragedia individual. Es una política de facto.
Estos datos exponen el abandono sistemático que convierte la distancia en una forma de violencia estructural contra las comunidades rurales, mientras la resistencia comunitaria en Oaxaca denuncia esta política de muerte.
Lección 1 – Del Río Xangá Ndá Ge a Gaza: El Despojo como Sistema Global
La historia de Miguel podría parecer distante de lo que ocurre a 140 kilómetros al norte, en Eloxochitlán de Flores Magón, donde pobladores mazatecos llevan años huyendo de órdenes de arresto por defender su río del saqueo de grava. Podría parecer ajena a lo que sucede en Gaza, donde un bloqueo genocida impide la entrada de medicinas y alimentos. Durante estos cuatro meses, El Giro de la Rueda documentó que no lo son. Son manifestaciones locales de un mismo sistema global de despojo que opera con crueldad aquí mediante el abandono sanitario, allá mediante la criminalización judicial, más allá mediante el bombardeo directo.
La resistencia comunitaria en Eloxochitlán y la lucha palestina comparten el mismo adversario: un sistema extractivista que despoja territorios mediante la violencia legal o militar.
Jaldía Abubakra: Técnicas de Represión Exportadas desde Palestina

Jaldía Abubakra, estratega de la desobediencia civil que participó en la Global Sumud Flotilla —una coalición de activistas de 47 países que intentó romper el bloqueo israelí a Gaza—, lo expresó sin ambigüedad en entrevista: “La represión que se ejerce sobre los pueblos por parte de gobiernos está muy vinculada con la represión que ejerce la entidad sionista sobre el pueblo palestino”. Las técnicas de vigilancia probadas en palestinos se exportan para controlar movimientos sociales en América Latina. Las armas que masacran en Gaza se venden a dictaduras africanas. Los métodos de interrogatorio y tortura desarrollados en cárceles israelíes se enseñan a policías de todo el mundo.
La activista mexicana Karen Castillo, navegando hacia Gaza, trazó el mapa de estas conexiones con una frase que funciona como diagnóstico: “México y Gaza están más cerca de lo que pensamos porque compartimos los dolores de la violencia y los asesinatos de periodistas”. No es una expresión solidaria. Es el análisis de un sistema que perfecciona sus herramientas de dominación en un territorio para exportarlas a otro.
Lección 2 – Eloxochitlán: Cuando la Ley es el Arma del Despojo
El caso de Eloxochitlán, divulgado durante este periodo, muestra el fucionamiento de esta maquinaria. Desde 2011, la comunidad mazateca defiende su río del cacique Manuel Zepeda Cortés, quien consolidó su poder bajo el gobierno de Gabino Cué y opera con protección estatal hasta hoy. La respuesta del Estado no fue la búsqueda de justicia sino la persecución sistemática de defensoras y defensores con órdenes de arresto, expedientes fabricados con testimonios idénticos, más de 200 órdenes de aprehensión reactivadas. Catorce personas, incluyendo a Jaime Jacob Betanzos, llevan más de una década sin poder regresar a casa.
Naxindá: La Asamblea Mazateca donde Agua y Montaña son Indivisibles
La defensora Argelia Betanzos explicó que en mazateco, cuando se convoca a la asamblea, se dice “Naxindá”, palabra que une dos conceptos: “Naxi”, la montaña, y “Nandá”, el agua. Para el pueblo mazateco, defender el río no es un acto inseparable de la vida cotidiana. Es defender la posibilidad misma de existir como comunidad. El sistema judicial mexicano ha convertido esa defensa en un delito.
Esta forma de resistencia comunitaria mazateca, arraigada en la cosmovisión que une montaña y agua, enfrenta un aparato judicial diseñado para criminalizarla.
Las Mujeres Mazatecas por la Libertad sostuvieron un plantón de dos años y medio frente al Consejo de la Judicatura Federal. No fue tan solo una acción simbólica sino una táctica de exhibición pública que obligó a los funcionarios a salir a la calle y reconocer la injusticia. Hasta septiembre de 2025, 21 personas habían recuperado su libertad. Pero 200 órdenes de arresto siguen activas. La diputada de Morena, Elisa Zepeda —hija del cacique— y el gobernador Salomón Jara patrocinan la represión.
Lección 3 – Sumud: Resistir con Dignidad Durante Décadas
En entrevista para El Giro de la Rueda, Jaldía Abubakra explicó que el pueblo palestino tiene una palabra para esta resistencia sostenida durante décadas: “Sumud”. “Es una palabra muy arraigada en el pueblo palestino que lleva firme en su resistencia casi cien años”, dijo. Se usa comúnmente para describir la entereza de los prisioneros políticos que soportan años de encarcelamiento. Sumud no es solo aguantar. Es persistir con dignidad cuando el sistema diseña tu derrota.
Radio Huaya: 60 Años de Comunicación Comunitaria
Esa misma persistencia ha sostenido durante 60 años a Radio Huaya, “La Voz Campesina”, cuyo aniversario se reportó en este periodo. La emisora teje una red de corresponsales comunitarios que se extiende desde la Sierra Norte de Veracruz hasta la región Otomí-Tepehua de Hidalgo. Lejos de ser una estación tradicional, es una herramienta de resistencia que articula —tal como lo definió la corresponsal Silvia Yesenia— una comunicación “con, desde y para las propias comunidades”.
Filiberta Nevado Templos, corresponsal de Radio Huaya, recordó el origen de su labor como correponsal: “Un buen número de gente nos organizamos para defender ese monte y en esa defensa buscamos, buscamos difundir lo que estaba ocurriendo”. Era 2008 y la tala clandestina amenazaba el manantial que da de beber a Zacacuautla, Hidalgo. La urgencia por defender el agua la transformó en comunicadora. Su testimonio nos enseña la fuente de la comunicación comunitaria: no nace del oficio periodístico sino de la necesidad vital de defender la tierra.
Lección 4 – Contar la Propia Historia: Comunicación vs Extractivismo Informativo

Pero sostener este contrapoder mediático tiene un costo material. La comunicadora comunitaria Iliria Ninel Gómez Martín lo expresó sin rodeos: “Como comunicadora popular, uno de los principales retos a los que me enfrento es la economía… la movilidad sale de nuestros recursos, de nuestros bolsillos”. Sostienen con sus propios medios una labor que beneficia al colectivo, mientras las corporaciones mediáticas obtienen ganancias millonarias reproduciendo la ideología dominante.
La resistencia comunitaria también se construye contando la propia historia, rechazando el extractivismo informativo de los medios corporativos.
Claudia Sheinbaum y la Insensibilidad Institucional ante Gaza
Cuando Karen Castillo navegaba hacia Gaza, la presidenta Claudia Sheinbaum respondió a una pregunta sobre la seguridad de los ciudadanos mexicanos en la flotilla con una frase que muestra la insensibilidad institucional: “México busca la paz”. Mientras tanto, en Eloxochitlán, 200 órdenes de arresto siguen activas contra defensores y defensoras del agua. En la costa de Oaxaca, las y los niños de pueblos originarios siguen muriendo en el camino hacia hospitales que están a diez horas de distancia.
Lección 5 – Solidaridad como Autodefensa: El Genocidio es Global
Jaldía Abubakra cerró su análisis con una claridad implacable: “El genocidio forma parte de un sistema capitalista, imperialista que oprime a toda la clase trabajadora a nivel global”. Desde esta perspectiva, la defensa de Palestina no es un acto de altruismo sino de autodefensa. Las mismas empresas que sostienen la ocupación en Palestina operan en América Latina. Las mismas lógicas de despojo que criminalizan a las y los mazatecos bombardean a las y los palestinos. El mismo abandono que mató a Miguel en un autobús deja morir a miles de niños y niñas en Gaza por falta de medicinas.
Esa misma persistencia sostiene desde hace 60 años a Radio Huayacocotla, un ejemplo de resistencia comunitaria que articula comunicación “con, desde y para las propias comunidades”.
Iliria Ninel Gómez lo expresó con una fuerza innegable: “Nos reconocemos como una historia digna de ser contada, que nos inspira a seguir caminando… porque nadie viene a contarnos lo que somos, lo que hacemos o lo que soñamos, sino nosotros mismos”.
La Palabra que Alcanza de Oaxaca a Gaza

Estos cuatro meses de cobertura —de junio a septiembre de 2025— revelan un patrón que el poder prefiere mantener fragmentado: Miguel muriendo en un autobús, familias mazatecas huyendo de la justicia corrupta, activistas navegando hacia Gaza, las comunicadoras comunitarias sosteniendo la radio con sus propios recursos. Historias que los medios corporativos presentan como casos aislados, tragedias inconexas, problemas locales sin conexión aparente.
Radio Huaya lleva sesenta años documentando estas conexiones. En programas como Se Tiene que Decir, la emisora amplifica la lucha del pueblo de Eloxochitlán, une la defensa del territorio con las crisis humanitarias y ofrece un micrófono a quienes el poder ha intentado silenciar. Sus transmisiones son un acto de Sumud; sus crónicas, un registro vivo de que estas luchas nunca dejaron de andar.
La palabra Alcanza Lejos, dicen en las montañas de la Huasteca. Alcanza lo suficiente para conectar la costa de Oaxaca con Gaza. Alcanza para documentar que Miguel Hernández y los niños palestinos que mueren bajo los escombros son víctimas del mismo sistema. Alcanza para probar que la solidaridad no es caridad sino supervivencia colectiva. Alcanza para nombrar lo que el poder prefiere mantener en silencio: que el despojo no tiene fronteras, pero la resistencia tampoco.
La resistencia comunitaria en México y la lucha palestina no son paralelas sino entrelazadas: comparten enemigos, métodos de represión y horizontes de liberación.
Lo que el El Giro de la Rueda publicamos entre junio y septiembre de 2025 documenta que la resistencia comunitaria no es un conjunto de casos aislados sino un movimiento global contra el despojo., que la ley criminaliza la defensa de la vida, que la resistencia es una práctica de larga duración, que contar la propia historia es un acto de dignidad, que la solidaridad es autodefensa colectiva. Verdades que no nacen de la teoría sino de la experiencia de comunidades que siguen andando.
Suscríbete. Ingresa tu correo electrónico y recibir todas las actualizaciones.
Your message has been sent
Notas Recientes
- Resistencia Comunitaria: De Oaxaca a Gaza, Cinco Lecciones de Lucha
- Pueblo Yaqui: Resistencia por Tierra y Agua
- Criminalización de defensoras ambientalistas en Oaxaca
- Mujeres Mazatecas Exponen Corrupción Judicial en la SCJN
- 140 mujeres artistas de pueblos originarios ocupan el MUNAE con Grabadoras de Historias


0 respuestas a “Resistencia Comunitaria: De Oaxaca a Gaza, Cinco Lecciones de Lucha”